La coracha de Málaga une el castillo de Gibralfaro y la alcazaba de Málaga, situados todos ellos en una colina a las afueras de Málaga, capital provincial.
La Coracha de Málaga consiste en una doble fila de murallas zigzagueantes que se levanta a lo largo de la cresta de la colina y une la alcazaba con el castillo de Gibralfaro enlazando con su recinto exterior.
Su ingenioso trazado permitía que las fuerzas alojadas en el Castillo de Gibralfaro accedieran rápidamente a la alcazaba, en caso de que esta fuera atacada o estuviera en peligro, dándoles completa protección dada su altura.
Ha sido restaurada y consolidada, y se encuentra en buen estado de conservación.
Bien protegido por la declaración genérica del Decreto de 22 de abril de 1949 sobre la protección de los castillos españoles (BOE núm. 125, de 5 de mayo de 1949) y por la Ley 16/1985, de 25 de junio, de Patrimonio Histórico Español (BOE núm. 155, de 29 de junio de 1985).
MonumentalNet agradece la colaboración de Benito Ruiz Peinado, Luis Carlos Gargallo Martínez, Luis Puey Vílchez, Miguel Ángel Cebrián Martínez, Ramón Sobrino Torrens