Comunidad: Castilla y León |
Provincia: Burgos
Municipio: Covarrubias |
Localidad: Covarrubias
Dirección: Plaza de Doña Sancha
Código: BU-CAS-029
Monumentos militares: Torres señoriales, palacios en torre y torres de fortificación.
Torre mozárabe del siglo X que tendría función de vigía, en la que se cuenta fue emparedada doña Urraca.
El torreón de Doña Urraca se encuentra en la plaza de Doña Sancha de la localidad de Covarrubias, provincia de Burgos.
El Torreón de Fernán González es una construcción mozárabe que data del siglo X. Su construcción se enmarca en el contexto de la expansión de los condados de Castilla, donde Fernán González, conde de Castilla y considerado uno de los más relevantes de la historia medieval española, jugó un papel fundamental. Durante esta época, las torres como esta eran elementos clave en las fortificaciones que protegían las rutas comerciales y los núcleos poblacionales del reino.
El Torreón formaba parte de las defensas del castillo medieval de Covarrubias, que fue un punto estratégico en la defensa del valle del Arlanza durante los siglos IX y X. En el siglo XIV, la torre fue restaurada, aunque las intervenciones más significativas ocurrieron a finales del siglo XV, cuando el torreón comenzó a perder su función original como fortificación.
Según la leyenda popular, la torre recibió su nombre debido a la infanta Doña Urraca, hija del conde Fernán González, quien fue encerrada en ella por su padre como castigo por sus amores con un pastor. Aunque la veracidad de la leyenda es incierta, el nombre perdura, y la torre se ha asociado con este trágico episodio de la historia local.
En 1931, el Torreón de Doña Urraca fue declarado Monumento Histórico-Artístico, lo que contribuyó a su preservación. Posteriormente, en 1971, fue restaurado, lo que permitió que esta construcción medieval llegara a nuestros días en un estado bastante completo.
El Torreón de Doña Urraca tiene una planta de forma rectangular, con una base de 10 x 14 metros, que se va estrechando hacia la parte superior. La altura alcanza los 22 metros, lo que le confería una ventaja defensiva sobre los alrededores, permitiendo una buena visualización de las rutas y territorios circundantes.
La estructura es maciza, con muros de gran grosor, de aproximadamente 3 metros en la base, que se reducen a unos 2 metros en la parte superior. Está construida con grandes piedras irregulares en la base y sillares más trabajados en las secciones superiores. Esta diferencia en la construcción refleja la evolución de la edificación a lo largo de los siglos.
Una de las características más destacadas de la torre es el acceso, que se encuentra a media altura, en la cara sur del edificio, la cual da al río Arlanza. Este acceso es un arco de herradura, típico del estilo mozárabe, y está compuesto por dovelas irregulares que convergen por encima del centro del arco. Originalmente, la torre solo era accesible por una escalera de madera que se retiraba en caso de peligro, lo que hacía que la torre fuera casi inexpugnable.
El interior de la torre está dividido en cuatro plantas, separadas por techos de madera. La planta baja se utilizaba probablemente como almacén o prisión, y está separada del resto de la torre por una trampilla de madera. En el primer piso, el acceso se realiza a través de una puerta de herradura, y se encuentra una sala rectangular con una pequeña ventana, que podría haber sido utilizada como cuarto de vigilancia o guardia.
Las plantas superiores son espacios más abiertos, con troneras en los muros para permitir la defensa de la torre. La planta más alta, que originalmente era una plataforma almenada, ahora tiene un techo a cuatro aguas que fue añadido durante el siglo XIX, cuando se modificó el diseño original de la torre.
En 1971 fue restaurado, lo que permitió que esta construcción medieval llegara a nuestros días en un estado bastante completo.
Es de propiedad particular, y se usa como vivienda.
Visitable el exterior y ocasionalmente el interior, con permiso del propietario.
En 1931, el Torreón de Doña Urraca fue declarado Monumento Histórico-Artístico, lo que contribuyó a su preservación.
Bien protegido por la declaración genérica del Decreto de 22 de abril de 1949 sobre la protección de los castillos españoles (BOE núm. 125, de 5 de mayo de 1949) y por la Ley 16/1985, de 25 de junio, de Patrimonio Histórico Español (BOE núm. 155, de 29 de junio de 1985).
MonumentalNet agradece la colaboración de Eduardo Argote Fraile, José Luis Zarrabeitia Aguirre, Luis Carlos Gargallo Martínez, Martín Estévez Alonso, Miguel Ángel de Magán Sanmartín, Peter Burton, Raúl Gómez, Santiago López-Pastor Rodríguez