Monumento de los Huevos en Órgiva, Granada

Situación

El Monumento de los Huevos se encuentra en una rotonda junto a la avenida González Robles de la localidad de Órgiva, provincia de Granada.

Historia

El monumento fue instalado para rendir homenaje a una curiosa tradición local que data del 31 de enero de 1917, cuando el Rey Alfonso XIII visitó Órgiva. Durante esa visita, los habitantes adornaron las calles con miles de huevos pintados de diversos colores, colgados de balcones y árboles, como muestra de hospitalidad y riqueza. El rey, impresionado por esta peculiar decoración, comentó: "Cada pueblo presume de lo que tiene", y desde entonces, a los habitantes de Órgiva se les conoce como "hueveros". La anécdota se ha mantenido viva a lo largo de los años, formando parte de la identidad cultural del municipio.

Descripción

La obra consiste en dos huevos gigantes de mármol que simbolizan esta tradición única. Los huevos están acompañados por un olivo, en homenaje a la gran cantidad de olivos milenarios y centenarios que crecen en Órgiva, haciendo alusión a la importancia de la olivicultura en la región. La composición monumental es un recordatorio visual de la historia y las costumbres del pueblo, convirtiéndose en un símbolo distintivo que saluda a quienes llegan a Órgiva.

Estado de conservación

El monumento se encuentra en perfecto estado y es un punto de interés que atrae tanto a visitantes como a residentes, quienes aprecian el significado histórico y cultural que representa. La obra, junto al entorno natural de los olivos, resalta la esencia de Órgiva y su conexión con la tierra y las tradiciones.

Protección

El Patrimonio Histórico Español está protegido por la Ley 16/1985, de 25 de junio, del Patrimonio Histórico Español (B.O.E. núm. 155, de 29 de junio de 1985).