Convento de Santa Florentina en Écija, Sevilla

Situación

El Convento de Santa Florentina se encuentra en la calle Santa Florentina de la localidad de Écija, provincia de Sevilla.

Historia

El Convento de Santa Florentina fue fundado en 1461 y ha pertenecido desde entonces a la Orden de Religiosas Dominicas. A lo largo de los siglos, la estructura original ha experimentado diversas reformas, enmascarando parte de la construcción inicial. En el siglo XVII, se edificó el claustro principal, y a principios del siglo XVIII, la iglesia fue completamente labrada de nuevo. Estas transformaciones reflejan la evolución arquitectónica y artística del convento, que ha sido un centro de vida religiosa y cultural en Écija.

Descripción

El claustro, construido en el siglo XVII, es de planta cuadrada y consta de dos cuerpos porticados en sus cuatro lados, con arcos de medio punto que descansan sobre columnas toscanas, creando un espacio de gran armonía y sobriedad. La portada de la iglesia está realizada en piedra blanca de Estepa y presenta relieves que representan a Santo Domingo y Santa Florentina, figuras esenciales para la orden. El convento también es conocido por la repostería artesanal elaborada por las Madres Dominicas, siendo los "Bizcochos Marroquíes" uno de los productos más destacados, una receta original de Écija que data del siglo XVIII.

Estado de conservación

El convento se encuentra en buen estado de conservación, gracias a los cuidados de la comunidad de Madres Dominicas y las intervenciones realizadas a lo largo de los años. La arquitectura del claustro y la portada de la iglesia han sido preservadas, manteniendo el encanto y la historia del lugar. La tradición de la repostería artesanal sigue viva, atrayendo tanto a fieles como a visitantes que desean disfrutar de las delicias históricas del convento.

Protección

El Patrimonio Histórico Español está protegido por la Ley 16/1985, de 25 de junio, del Patrimonio Histórico Español (B.O.E. núm. 155, de 29 de junio de 1985).