El castro celtíbero de El Castellar se encuentra sobre una pequeña loma a unos cientos de metros de la laguna de Gallocanta, a dos kilómetros de la localidad de Berrueco, provincia de Zaragoza.
Fechado en torno a los siglos II y I a.C., constituye uno de los yacimientos de parecidas características emplazados en las comarcas de Daroca y Calamocha, pequeños castros cercanos a zonas ganaderas o yacimientos mineros.
El poblado ocupa una extensión de unos seiscientos metros cuadrados y se organiza en torno a una calle principal, orientada de norte a sur, que da acceso a unos 20 ó 30 hogares.
Estos habitáculos, de pequeñas dimensiones, tienen muros de adobe y tapial, sus suelos de tierra, aunque también se pueden ver algunas lajas de piedra, y estarían cubiertos por techos de ramas unidas con barro.
El poblado estaba rodeado por una muralla y esta por un foso. La muralla estaba formada por grandes sillares en la cara exterior y rellena en su interior por cantos y tierra. En algunos tramos aún pueden verse hasta 4 hiladas de grandes piedras.
La entrada al recinto se realiza por un desarrollado sistema en zig-zag abierto hacia la laguna, al oeste.
El yacimiento ha sido bastante bien consolidado desde su descubrimiento en 1976, aunque la señalización y el acceso desde la carretera no son buenos.
Bien protegido por la declaración genérica del Decreto de 22 de abril de 1949 sobre la protección de los castillos españoles (BOE núm. 125, de 5 de mayo de 1949) y por la Ley 16/1985, de 25 de junio, de Patrimonio Histórico Español (BOE núm. 155, de 29 de junio de 1985).
MonumentalNet agradece la colaboración de Vicente Rodrigo Lozano